Nada que hacer, ningun lugar a donde ir

Estas aquí. Siento tu presencia y aunque se que ya nunca será igual que antes, te noto mas cerca de mi que nunca .

Gracias a ti, tuve la oportunidad de ver otro camino que sola, indiscutiblemente no hubiera sido capaz. Me distes la mano en un momento de mi vida que fue decisivo y crucial para empezar un camino que me llevo a convertirme en la mujer que soy hoy.

Recuerdo la primera vez que te vi.. llegue a Belianes y, aun no se conscientemente la decisión que me llevo a conocerte, indudablemente ese fin de semana cambiaria mi existencia y la percepción que yo tenia de lo que creía que era la vida.

Tras la sutileza de cada movimiento tuyo, de cada palabra, empecé a vislumbrar un ápice de esperanza hacia una nueva mirada hacia mi que me trajera mas comprensión, ligereza, amor y paz.

Hasta ese día no había comprendido lo que tantas veces antes había leído a cerca de que el inicio del cambio empieza cuando te das cuenta que tú mismo eres el cambio, y así fue, ahí entendí que cuando cambias la mirada de ver las cosas, las cosas que miras cambian.

Fuiste como una bocanada de aire fresco, liberador, arrollador y tuve claro que a partir de ese día no podría parar de tirar del hilo para ir buscando y reconociendo todas esas sensaciones que habitaban en mi para transformarlas en algo nuevo, mas ligero, amoroso, flexible, sereno. Como cuando tiramos del hilo de un ovillo, dando luz a cada uno de los enredos , iluminando cada una de las partes que habitaban en mi mente, en mi cuerpo, y en mi corazón.

Si pudiera comprimir en una idea lo que tanto me enseñaste, lo haría tan sólo con una frase, un sólo momento y fue cuando me comentaste... "Nada qué hacer. ningún lugar a dónde ir". Por aquella época, yo era la reina del control y con mirada perpleja me quede intrigada en cómo lograría hacer lo que me proponías ¿Qué tengo que hacer ahora Lena? "Nada Sylvia, nada, todo llega a su debido tiempo"

Y ahora, después de todos estos años, empiezo a sentir desde mi corazón todo lo que significaron esos aprendizajes, esas palabras de entonces y ahora, las siento arraigadas en mi ser. Todo es tan sencillo y lo que nos llegamos a complicar la vida para buscar lo que ya tenemos, lo que ya somos.

Son estas palabras de agradecimiento por tanto que me distes, por permitirme ser, por mostrarme la grandeza de lo que ya somos, por tan inconmensurable amor que compartimos . Tu fuerza y tu coraje me acompañaran y serán esa luz que siempre tendré presente para recordar mi camino, mi propósito y el amor que ya soy.

Alla en donde estés, nos encontraremos para tomar ese Carrot cake

Gracias Lena por tanto amor